El grupo Roche ha elegido a la filial española para albergar el Centro Global de Excelencia. Este centro, situado en Madrid, supera los 350 profesionales directos más otros 200 empleos indirectos, con una inversión anual de 50 millones de euros. Además, el grupo apuesta por la innovación sostenible con el proyecto ‘Stop fuga de cerebros’, un programa que fomenta la investigación.
Jorge Ramírez, director financiero de Roche Farma España.
En 2016, las ventas del grupo y de la división Pharma aumentaron el 4% y 3%, respectivamente. ¿cuál es la evolución en este año?
Este año nos movemos en un entorno similar al del último ejercicio, tanto en el grupo Roche como en la división farmacéutica. Las previsiones apuntan a que tendremos un ligero crecimiento, respecto al año anterior, y el crecimiento del beneficio se situará ligeramente por encima del crecimiento en ventas.
¿Qué significa para usted que les hayan elegido para albergar el centro global de excelencia informática?
Es un gran logro y un orgullo contar en nuestro país con el Centro Global de Excelencia Informática, situado en Madrid desde el año 2003. Actualmente, el Centro de Excelencia supera los 350 profesionales contratados de forma directa y más de 200 empleos indirectos, con una inversión anual de alrededor de 50 millones de euros. De esta manera, las oficinas de Madrid son la principal infraestructura informática de la compañía en el mundo, dan soporte a 156 países y más de 250 localizaciones, entre las que podemos identificar centros de investigación, producción y logística
¿Qué factores inciden, en positivo o en negativo, para elegir Madrid?
La estabilidad legal y jurídica, junto al nivel impositivo, favorece la inversión en esta división del grupo. Además, la capital española ofrece a Roche una localización donde existen profesionales altamente cualificados en el sector IT a la vez que unas condiciones de mercado competitivas en salarios y formación.
Roche forma parte del índice de Sostenibilidad Dow Jones.
¿Cuáles son los objetivos en sostenibilidad?
La sostenibilidad es algo intrínseco a la cultura del Grupo Roche que todas las filiales asumimos. Forman parte de los objetivos corporativos de la compañía. Se agrupan en tres grandes bloques: Personas, que se refieren a diferentes acciones que mejoran la experiencia y el bienestar de nuestros empleados; Entorno, relativos al cuidado de los entornos en los que operamos, y Negocio, que se fundamentan en una exigente selección de proveedores. Esto, nos lleva a estar clasificados, por octavo año consecutivo, como la compañía más sostenible del sector de la salud en el Índice de Sostenibilidad Dow Jones.
Este año han puesto en marcha el proyecto ‘Stop fuga de cerebros’ ¿Con qué objetivos y resultados?
El objetivo fundamental es apoyar la labor de los jóvenes investigadores de nuestro país. Gracias a este proyecto de becas, de duración de dieciocho meses, Roche pone a disposición de las consejerías de Sanidad autonómicas un instrumento para impulsar la financiación de proyectos pre y postdoctorales orientados al fomento de la investigación. Hasta la fecha se han adscrito a este proyecto las consejerías de Andalucía, Canarias, Madrid, Aragón y la Comunidad Valencia. En estas dos últimas comunidades ya se han fallado las becas.
¿Qué hacer para mejorar la innovación y el desarrollo en España?
Existen diversos planteamientos que nos pueden posicionar en un lugar destacado en materia de innovación. Por ejemplo, trabajar conjuntamente por el desarrollo de políticas integrales que favorezcan la I+D como palanca de progreso económico y social es un buen punto de partida. Por otra parte, favorecer entornos que hagan atractiva la inversión en innovación por parte del ámbito empresarial resulta clave para hacer de España un lugar atractivo. En definitiva, afianzar la apuesta por sectores innovadores, que generan un gran valor añadido, fomentan el empleo cualificado y de elevada productividad y competitividad.
