La globalización, las empresas multinacionales, las nuevas tecnologías y el conocimiento serán las fuerzas que impulsen el cambio hacia la nueva sociedad que surgirá tras la crisis que está experimentando el actual sistema capitalista. Así lo asegura Ramón Casilda en su libro ‘Crisis y reinvención del capitalismo’, que fue eje de debate entre expertos el pasado 18 de octubre en Esade Madrid.
El acto de presentación estuvo moderado por Salvador Molina, presidente de Foro ECOFIN y de Telemadrid, y contó con la presencia de Enrique Verdeguer, director de Esade Madrid; Enrique V. Iglesias, ex presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y primer secretario general iberoamericano, y Alejandro Werner, director del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional.
La obra desgrana las distintas fases que ha experimentado el capitalismo a lo largo de su historia y presenta los primeros trazos de una quinta fase que el autor ha denominado capitalismo global interactivo, cuyos inicios sitúa en la misma crisis o Gran Recesión. Al sumergirse en las claves que fundamentan el sistema capitalista y sus crisis recurrentes, el texto intenta buscar soluciones efectivas que eviten incurrir en los errores del pasado.
“El rostro de capitalismo global interactivo aún no se ha dibujado y tampoco se sabe todavía si esta nueva fase evitará las crisis económicas; pero lo más seguro es que los desajustes continúen porque son consustanciales a la economía de libre mercado”, aseguró el autor.
De hecho, los expertos que participaron en la presentación afirmaron que en la actualidad se podría estar incubando una nueva crisis financiera todavía más dura que la que se inició en 2007, basada en la deuda soberana y otros desajustes financieros del sistema global.
“No sólo hay que reinventar el capitalismo, sino también la sociedad, los ciudadanos y el liderazgo. Pero no sé si los líderes actuales están preparados para hacer frente a todos estos desafíos”, señaló Enrique V. Iglesias, ex presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y primer secretario general iberoamericano.
Lo que sí cambiará, según explicó Ramón Casilda, será el germen que dará origen a esas crisis económicas. “El capitalismo se ha quedado sin un referente contra el que competir y eso está dando lugar a importantes desajustes. El único contrapoder eficiente que vacunaría estos excesos es la ética del propio hombre. Esta ética se encuentra plasmada en los libros sagrados; pero es muy poco practicada. Hay más moralina que moralidad”, afirmó.
Al analizar por separado las cuatro fuerzas propulsoras que Ramón Casilda expone en el libro, los expertos coincidieron en afirmar que la globalización es producto de la innovación en las comunicaciones. “No es posible hablar de globalización si no hablamos de internet”, recalcó Casilda. “En los próximos años facilitará todavía más el proceso de globalización”, continuó.
También las multinacionales son generadoras de cambios. Y no sólo por su propia evolución, sino porque generan empresas innovadoras. Sin embargo, tendrán que acomodarse a los cambios que se están gestando si no quieren quedar fuera del sistema. “Las multinacionales han tenido mucho poder; pero no habría que perder de vista a las empresas locales, que también tienen gran influencia. Un sistema con multinacionales y compañías locales sería más equilibrado”, aseguró Alejandro Werner, director del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional.
Pero las empresas no podrán subsistir sin tecnología y tampoco sin conocimiento que, según el autor, es “la herramienta fundamental del siglo XXI y hace capaz que las innovaciones y el progreso continúen”.