Fue detenido por última vez en abril de 2018 en la Universidad de Comillas. Un año después, volverá a ser el centro del debate en otra universidad: la Complutense, durante el 9º Congreso ProCom que se celebra el 4 de abril, con asistencia gratuita previa inscripción en la web.
Está en busca y captura por parte del Gobierno de Suiza y hay 130.000 defraudadores de todo el mundo que se vieron perjudicados por figurar en su ‘lista Falciani’, que varias Haciendas y Tribunales han utilizado para perseguir delitos económicos, fraude y asuntos de narcotráfico. Países como España, Francia y Estados Unidos le consideran un confidente digno de la protección de testigos, pero otros le persiguen.
El ingeniero de sistemas Hervé Falciani es un referente del periodismo de datos, del periodismo de denuncia, del periodismo de investigación. Puso la información a disposición de la Prensa y de la Justicia. Y ahora, tiene nuevos proyectos para perseguir las fake news (noticias falsas y bulos), así como aportar transparencia a un mundo de fraude que está oculto tras la abundancia de la información, la tecnología y los poderes fácticos.
Nuevos objetivos de Falciani
Dos colaboradores de Falciani estarán en el Congreso ProCom de Periodismo Digital para contarnos los nuevos planes de Falciani y la voz del ex empleado del HSBC en Suiza se volverá a escuchar en una universidad española, aunque sea a través del ciberespacio o en crónica pre-grabada.
Juanma Soynadie y Míster Q son los nombres en el ciberespacio de los dos colaboradores de Hervé Falciani, el informático italo-francés refugiado en España que no pudo callarse ante la mala práxis del HSBC Suiza en su supuesta colaboración con el fraude y el delito. De allí surgió su lucha por desvelar al mundo para qué servía el velo bancario suizo y fue el inicio de la desaparición de éste velo bancario y la lucha contra los paraísos fiscales por el impulso del Gobierno de los Estados Unidos y Europa.
La lista Falciani
Hervé Falciani trabajó como informático en la reorganización de la base de datos para reforzar la seguridad de la filial suiza del banco HSBC entre 2001 y 2008. A lo largo de ese tiempo consiguió sustraer información de hasta 130.000 posibles evasores fiscales de varias nacionalidades.
Falciani asegura que tras conocer la forma de gestionar los datos bancarios de la entidad trató de comunicarlo a las autoridades judiciales suizas; pero no lo consiguió. Con el objetivo de despertar las sospechas del sector bancario suizo, desveló que viajó a Beirut; pero tanto HSBC como las autoridades del país insisten en que Falciani trató de vender los datos.
En 2008 fue detenido y tras ser puesto en libertar huyó a Francia donde el entonces jefe de la fiscalía de Niza, Éric de Montgolfier, contactó con él. Con esta relación comenzó la investigación contra los supuestos defraudadores.
En aquel momento las autoridades suizas dictaron una orden de detención internacional por lo que Falciani fue detenido en Barcelona en 2012 e ingresó en la cárcel madrileña de Valdemoro. Un año más tarde, Falciani quedó en libertad. La Audiencia Nacional de España decidió no extraditarlo por su colaboración con la justicia al considerar que los datos “se refieren a actividades sospechosas de ilegalidad e incluso constitutivas de infracciones penales que de ninguna manera son susceptibles de legítima protección”.
La Cámara Federal Penal de Suiza condenó en rebeldía a Falciani a cinco años de prisión por espionaje en 2015; pero al ser residente nacional francés en Francia no pudo ser extraditado. El 4 de abril de 2018, Falciani fue detenido en la Universidad de Comillas; aunque un día después fue puesto en libertad con medidas cautelares por la Audiencia Nacional.
EEUU, España y Francia con Falciani
La denominada ‘lista Falciani’ incluye los nombres de más de 130.000 supuestos evasores fiscales que fueron sustraídos por Hervé Falciani de la filial suiza del banco HSBC en 2009.
El subcomité del Senado de los Estados Unidos acusó al banco HSBC de blanquear dinero del narcotráfico y de hacer negocios con determinados clientes de Irán. Ante ello, la cámara alta impuso a la entidad una multa de casi 2.000 millones de dólares.
Esta lista se usó por primera vez en 2010 cuando Éric de Montgolfier, por entonces jefe de la fiscalía de Niza, abrió una investigación contra los presuntos defraudadores. Francia envió la lista a diversos países entre los que se encuentra España donde también investigaron los nombres recibidos, 659 de 1.500. Gracias a esta información nuestro país recuperó 260 millones de euros y obligó a la regularización fiscal de grandes fortunas españolas, políticos y empresarios.