Carlos González, abogado y mediador, visita ‘Libros que dejan huella’ para hablar de ‘La Verdad’, un libro que recoge la historia de esta quimera y desvela con sencillez qué podemos entender realmente como ‘verdad’ en la sociedad del siglo XXI. Una pista: no tiene nada que ver con lo que pensamos ahora mismo.
Todos los seres humanos decimos perseguir dos cosas: la felicidad y la verdad. Quizás retroalimentamos ambas ideas, que en realidad no son más que eso: ideas. ¿Qué es la felicidad? Para algunos, un deportivo o un ascenso en el trabajo; para otros, un paseo por el campo o un abrazo de su hijo. ¿Y qué es la verdad? Basta coger un par de periódicos de distinto signo para darse cuenta de que, ante una misma realidad, la verdad se divide, misteriosamente, en dos realidades paralelas donde ninguna de ellas es mentira, pero tampoco… verdad.
El abogado y mediador Carlos González ha escrito ‘La Verdad’ en un intento por arrojar conclusiones que nos ayuden a encontrar esta quimera donde realmente vamos a poder encontrarla. Y, para ello, se remonta a nuestra propia historia. Explica en ‘Libros que dejan huella’, el programa que presenta Alexa López en Ahora TV que la cultura occidental se ha construido en el Ágora griega porque es lo único que funciona. Ahí tenemos ‘la verdad’: “Lo que funciona para los seres humanos es la conversación y la discrepancia, que es lo que deja como poso la verdad”, explica el autor.
Mi verdad y tu verdad
González reconoce que no podemos etiquetar como ‘verdad’ a nada en particular, y desde luego a nada absoluto, sino a los puntos de encuentro entre verdades. “Con el lenguaje podemos construir una verdad o una mentira, y no nos damos cuenta de ello”, asegura. Por eso invita a que hagamos uso de las comparaciones a la hora de describir algo como verdad o mentira. “Si no ponemos el fin perseguido [de algo] no podemos saber si está bien o está mal”, explica. Y pone algunos ejemplos que ayudan a comprender el verdadero concepto de verdad: