La especialización en inversión pasiva, enfoque a largo plazo y asset allocation global ha sido la fórmula con la que Finizens ha logrado maximizar las rentabilidades de sus carteras mitigando el riesgo de los mercados desde su lanzamiento. Gracias a esta estrategia, la firma de gestión patrimonial automatizada ha alcanzado una rentabilidad que supera el 4,7% por encima de la media del mercado desde enero de 2017. La compañía cuenta con una estrategia basada en un profundo análisis de datos históricos reales acerca de los mercados globales a través de algoritmos desarrollados internamente.
“En el corto plazo, las rentabilidades suelen ser aleatorias. Sin embargo, invirtiendo de forma diversificada y disciplinada a largo plazo es cuando se cumple de manera consistente la relación de a mayor riesgo, más rentabilidad. En este sentido, recomendamos un horizonte de inversión de mínimo de siete u ocho años para que nuestra estrategia de inversión pasiva desprenda su pleno y verdadero valor”, señala Giorgio Semenzato, CEO de la compañía.
Una de las claves que explica el rendimiento superior de las carteras que ofrece la gestora automatizada con respecto a la media de mercado es la diversificación. En su universo de inversión incluyen cinco clases de activos diferentes en lugar de las tres habituales: renta variable, renta fija, materias primas, inmobiliario y liquidez. La alta diversificación resultante se manifiesta en carteras con aproximadamente 15.000 posiciones distintas, que permiten una exposición global a distintas economías y sectores mitigando el riesgo de las inversiones de sus clientes.
Así, la inversión indexada que ofrece Finizens generó una rentabilidad de hasta el 4,7% por encima de la media de mercado, en el caso de la cartera con perfil de mayor riesgo que ofrece la firma. Otro factor determinante para explicar estos datos de rentabilidad son las bajas comisiones de sus carteras, hasta un 85% inferiores a las de las entidades financieras tradicionales.