Los resultados de la Encuesta de Población Activa (EPA) del cuarto trimestre de 2015 arrojan un incremento en el número de ocupados de 45.500 personas y un descenso en el número de parados de 71.300. Así, el pasado ejercicio cerró con 500.000 empleos recuperados, mientras el número de parados descendió en cerca de 700.000 personas.
Al analizar los datos recogidos por la EPA, el Observatorio Laboral de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) señala que el final de 2015 “muestra un balance claramente favorable en cuanto al número de empleos recuperados tras la crisis”, si bien recalca que existen dos bloques regionales muy diferenciados. Por un lado, las regiones del noroeste y Madrid, que tienen a más del 50% de sus ciudadanos mayores de 16 años ocupados. Por el otro se sitúan las regiones de la franja oeste que, junto a Andalucía, Castilla-La Mancha, Canarias y Extremadura, no superan el 45% de ocupación entre su población adulta.
Aunque el desempleo disminuye en todas las comunidades, el País Vasco destaca como la región con menor tasa de paro, ya que ha conseguido bajar del 13%, mientras que Andalucía es la región con mayor porcentaje de personas sin empleo, alcanzando el 30%.
El colectivo que ha experimentado un mayor aumento de la ocupación ha sido el de los mayores de 44 años. Del casi medio millón de nuevos empleos creados el pasado ejercicio, más de 400.000 fueron para personas en edades comprendidas entre los 25 y los 44 años, mientras que tan sólo 42.000 fueron para jóvenes menores de 25 años.
Sin embargo, hay que recalcar que la mayor parte del empleo creado en 2015 es temporal. El número de asalariados con este tipo de contrato temporal aumentó en unos 335.000, mientras que el aumento de asalariados con contrato indefinido asciende a la mitad.
Por sectores, la recuperación del empleo en la industria es todavía una asignatura pendiente en la mayoría de las regiones españolas. Aunque existe gran disparidad en la incidencia de la industria entre las diferentes regiones, en 2015 no se observa en general un impulso en el empleo de este sector en prácticamente ninguna región.
La construcción, por su parte, sigue destruyendo empleo aunque con menor intensidad que en el mismo trimestre del año pasado.
El sector de la agricultura ha experimentado en este trimestre un incremento neto del empleo formidable. En este cuarto trimestre se han creado más de 45.000 empleos netos en este sector, aunque se constata que el cuarto trimestre de cada año es claramente favorable a la creación neta de empleo en este sector.