BME dice que se dispara el ahorro y la inversión

El contexto internacional mejora. Es la conclusión que se puede extraer del discurso de Domingo García Coto, director del Servicio de Estudios de Bolsas y Mercados Españoles (BME), durante su presentación en la jornada ‘Perspectivas 2015’, que se celebró en la Bolsa el pasado 4 de febrero.

Haciendo balance, si por algo se ha caracterizado el 2014 es por una continuación de las políticas monetarias agresivas por parte de los Bancos Centrales, intentando luchar contra la temida deflación. Especialmente, tras constatar que la Zona Euro alcanzaba una inflación interanual en tasas negativas. Algo que abre, a juicio de García Coto “una expectativa de riesgo, que parece limitado, de un largo estancamiento llegando incluso a entrar en un periodo de deflación”.

Motivo por el que existe una gran presión para que el BCE no baje la guardia, en pro de medidas mucho más agresivas. Además de esto, lo que está claro es que, en el sistema financiero mundial sigue existiendo una enorme liquidez. Algo que va a seguir existiendo por un largo periodo de tiempo.

Pero, ¿cómo afecta este contexto a nuestro país?

Entre 2003 y 2015 vivimos una época difícil de pronosticar, pasando de un periodo enormemente confortable para la economía española, con el PIB creciendo entre el 3% y 4%, la inversión con tasas de crecimiento sostenido por encima del 4%, el consumo incrementándose a un ritmo del 4% real cada año, durante los últimos cinco años, y el empleo creciendo también entre el  4% y el 3%.

“Casi el escenario ideal que todo economista desearía”, según palabras del director del Servicio de Estudios de BME. Sin embargo, todo eso cambió. La inversión cayó hasta un 19% en el año 2009, algo que no se podía prever ni en las peores pesadillas de los expertos. Y, aunque existió un leve intento de salir en 2010, ese intento fracasó, hasta ahora.

La luz parece aparecer en 2014, año en el que hay claramente un punto de inflexión y el 2015 pinta aún mejor. Las previsiones que maneja García Coto son “que la inversión crezca al 4,4%, el PIB al 2%, el consumo hasta un 1,3% y el empleo al 1,4%”. Aunque, de seguir la tendencia que se ve cada día, “esas tasas se podrían llegar a superar”.

Los riesgos para la recuperación real de España

Durante los últimos años, especialmente si atendemos al periodo entre 2001 y 2009, observamos una enorme diferencia entre la inversión realizada en la economía española y el ahorro interno. Eso se traduce en que alguien ha tenido que financiar esa diferencia y es algo que ha venido del exterior.

Las cifras no engañan y son de lo más sorprendentes. Atendiendo al ahorro exterior desde el año 2010, vemos que se “nos ha financiado en unas cantidades que llegaron a ser de 100.000 millones de euros anuales en 2007 y 2008”. Un auténtico “chorro de ahorro exterior y algo todavía más sorprendente, que cada vez fue dinero más barato”. Es decir, que cada vez nos prestaban más y a mejores precios.

El problema es que en 2014 vuelve a producirse, en cierta medida, un déficit exterior. Y es que, derivada de esta masiva  entrada de financiación, nos ha quedado una deuda elevadísima. Por ejemplo, “en términos de PIB, sumando los sectores no financieros entre 2000-2012, subió 100 puntos”. Algo que apenas ha empezado a corregirse.

Con todo esto, tenemos sobre la mesa un problema difícil de abordar en próximos años y es una posición de la inversión internacional muy comprometida. ¿Qué es esto? “La diferencia entre activos financieros que España tiene en el resto del mundo y los activos financieros que el resto del mundo tiene en España (deuda pública, préstamos a nuestras empresas…)”, explica Domingo y “esa diferencia es ahora mismo negativa en el 100% del PIB”.

Este es un ratio similar al que tienen países como Grecia e Irlanda y más elevado que vecinos como Francia e Italia. Lo que sitúa a España en una posición de fragilidad financiera. Por ello, en su opinión, este sería “uno de los problemas más serios que tenemos ahora mismo” sobre la mesa.

El otro foco de interés se centra en la inversión. Un aspecto que durante esta crisis ha sufrido una caída importante, por parte de la inversión en construcción y de la destinada a bienes de equipo y materiales. Sin embargo, esta última parece que comienza a crecer desde el pasado año.

Por último, un breve apunte sobre la posición financiera de tres grandes sectores institucionales: familias, las empresas no financieras y las administraciones públicas. Entre ellas, es importante la evolución del endeudamiento de los hogares, que “ha pasado de algo más de 900.000 millones de euros en 2009 a corregirse en casi 125.000 millones en tres años y medio”. Por ello, García Coto se queda con una frase, que “el camino es importante”.

 

 

 

Panorama financiero 2014-2015 (ECOFIN Final feb15)

Pin It on Pinterest

Share This