Las calderas de condensación permiten el ahorro de más de un 25% en las facturas de gas a los consumidores españoles, ya que gastan menos energía al necesitar menos combustible y su rendimiento es mayor al aprovechar el calor del vapor de agua.
Así lo destacó la Asociación de Fabricantes de Generadores y Emisores de Calor por Agua Caliente (FEGECA) en una rueda de prensa celebrada este jueves con motivo de la puesta en marcha de su campaña “Si condensa, compensa”, a través de la cual quieren informar y concienciar a la ciudadanía acerca de las ventajas del uso de las calderas de condensación. Las cuentas salen:
Además de este importante beneficio económico, las calderas de condensación contribuyen al desarrollo sostenible, así como a la eficiencia energética y son más respetuosas con el medio ambiente, ya que emiten menos gases CO2 y NOx. Por todo ello, muchas Comunidades Autónomas están activando en sus territorios un Plan Renove de calderas de condensación que ofrece a los ciudadanos importantes ayudas de diferentes cuantías.
Estas calderas se ajustan, además, a la nueva normativa europea de etiquetado y diseño ecológico ErP, que obligará a las empresas del sector a la comercialización de equipos energéticamente más eficientes, como lo son las calderas de condensación, a partir del próximo 26 de septiembre. Esta nueva normativa afectará a todos los países miembros de la Unión Europea, ya que obedece al compromiso de Europa en su cumplimiento de acuerdos internacionales como el Protocolo de Kyoto o el Plan EU20.